¿Cómo
analizar a la competencia?
El
análisis de la competencia es la forma de poner tus ideas frente al espejo y
constatar sus defectos y debilidades, así como sus fortalezas y
oportunidades.
Cuando
empiezas un negocio te vas a encontrar con algo molesto, pero inevitable - y
sano - en una economía de mercado: la competencia. Salvo en situaciones de
monopolio, emprender significa también competir. Y uno no compite solo.
¿Qué
es la competencia?
La Real
Academia Española define la competencia como una "situación de empresas que rivalizan
en un mercado ofreciendo o demandando un mismo producto o servicio".
¡Pero
si mi producto es originalísimo!, te debes de decir. Bueno, para eso analizamos
a los competidores, para poner a prueba nuestra humildad.
En
efecto, analizar a la competencia es una forma de testar tu idea de negocio
antes de ponerla en práctica. ¿Cómo? Comparando. Dice el refranero popular que
las comparaciones son odiosas, pero sin comparación, no hay mejora. Si
analizamos a la competencia es para evitar caer en el error de repetir lo que
otros ya han hecho. Especialmente, para evitar los errores que otros ya han
cometido.
Como
en un estudio de mercado (y el análisis de la competencia forma parte
de él), para estudiar a la competencia has de fijarte unos objetivos.
Empieza haciéndote estas preguntas:
Empieza haciéndote estas preguntas:
¿Quién
es mi competencia? Y esta pregunta incluye cuántos competidores vas a
tener.
¿Cuál
es el tamaño de la competencia y su fortaleza financiera?
¿Cuál
es su volumen de ventas?
¿Cuál
es la calidad del producto o servicio que ofrecen?
¿Cuáles
son sus estrategias de marketing y ventas?
¿Quién
es mi competencia?
Las
empresas competidoras son aquellas que operan en el mismo mercado o sector
donde piensas implementar tu idea de negocio. Has de identificarlas por sus
nombres y apellidos.
Cuando
hablamos de competencia, podemos establecer tres grados según afecten a nuestra
área de negocio:
Competencia
directa: son aquellas empresas que operan en el mismo mercado. Es decir,
que venden el mismo producto o servicio y se dirigen a los mismos clientes
(segmento de mercado).
Competencia
indirecta: son empresas que operan en tu mismo mercado, se dirigen a los
mismos clientes, pero ofrecen un servicio o producto sustituto o alternativo.
Un ejemplo ayudará a entenderlo mejor: si tu idea de negocio es un café con un
aroma extraordinario, tu competencia directa serían todos los productores de
café, y la indirecta los productores de bebidas calientes sustitutivas como el
té.
Hay
una tendencia a subestimar a la competencia indirecta. Que esa tendencia no sea
la tuya. Haz la siguiente prueba contigo mismo: ve a una cafetería donde sirvan
cafés y tés. Pongamos que eres un adicto al café espresso y que en ese café
sólo sirven café americano. Es posible que detestes el café americano y te
decantes por un té, es decir, por un producto de la competencia indirecta.
¿Qué
aspectos de la competencia he de analizar?
Una
vez has identificado a tus competidores directos e indirectos, la siguiente
fase consiste en determinar los elementos que quieres analizar.
Pero
antes selecciona a aquellos competidores que creas más relevantes. Si vas a
operar en un mercado con muchos competidores, analizar a todos puede resultar
un error, especialmente si se tratan de competidores insignificantes cuya
información no te puede aportar mucho (aunque a priori sea difícil
saberlo).
Una
vez hecha la criba, fíjate en los siguientes aspectos:
Sus
productos o servicios. Es la base. Lo esencial.
Es decir: el qué venden.
Estudia cómo lo producen, quiénes son sus proveedores (en caso de tenerlos), qué
características tiene el producto (o los productos) que lo hace tan competitivo
(y viceversa: que lo hace un desastre). Que no se te escape toda su cartera de
productos y servicios.
Sus
estrategias de venta y marketing. Es decir, cómo lo venden: qué canales de
distribución utilizan, cuántos puntos de ventas tienen, cómo lo comercializan,
sus campañas publicitarias (publicidad online y offline), contenidos en páginas
web, redes sociales, foros, entre otros.
Volumen
de ventas. Así podrás hacerte una idea de la cuota de mercado.
Precios.
Aquí entran también sus campañas de promociones, tarifas y ofertas.
Recursos
y número de empleados.
Posicionamiento
en el mercado.
Cuentas
anuales.
¿Cómo
analizo a la competencia?
Observando. Observa a la competencia en todas sus manifestaciones. Una vez establecidos los
aspectos que quieres analizar, el cómo resulta más fácil.
¿Por
qué más fácil? La razón es sencilla, y salta a tu pantalla a golpe de clic:
internet. En la misma web de la empresa puedes encontrar información tan
valioso como precios, tarifas, puntos de ventas, servicios y productos. Muchas
empresas también permiten consultar su informe anual donde encontrarás
datos de ventas y facturación, así como su expansión con respecto a años
anteriores.
Investiga
en otras páginas web, en foros y redes sociales. Y no olvides la prensa (tanto
online como impresa) y las publicaciones especializadas.
Muchos
de los aspectos que quieres averiguar - como las estrategias de ventas y
marketing - no los podrás encontrar en abierto, a no ser que algún renegado de
la competencia te los filtre. Las campañas de promoción o publicitarias son
manifiestas. Observándolas en medios de comunciación e internet puedes colegir
qué estrategia siguen tus competidores.
Datos
como las cuentas anuales los puedes solicitar en el registro mercantil. Además,
hay empresas como eInforma que
te ofrecen informes de empresas, autónomos, valoración de empresas o informes
sectoriales.
Algunos
recomiendan entrevistar a antiguos empleados de la competencia. A nuestro
juicio, no deja de ser una recomendación bastante estrambótica. Aunque canales
como Linkedin te permiten
encontrar y contactar con exempleados, acudir a uno no deja de ser un riesgo
que te puedes ahorrar. Entre otras cosas por ética profesional (la tuya y la
del exempleado).
Pero
también por cuestiones lógicas: al ser exempleado ya no está al tanto de las
estrategias corrientes, por lo que toda información que te pueda ofrecer estará
desfasada o caer en eso que el escritor Nobel Mario Vargas Llosa llamó rumorología.
La
importancia de analizar a la competencia
Ilustrémoslo
con un ejemplo muy familiar en España, aunque esté muy trillado: quién no ha
observado en una calle una gran proliferación de bares de tapas que ofrecen
prácticamente lo mismo. La razón, muchas veces, es que el lugar donde están
ubicados es muy turístico o se trata del centro de encuentro de los locales (una
plaza mayor).
Al
faltarles una estrategia de negocio y no haber analizado antes a la
competencia, es probable que al cabo de un año algunos de esos bares cierren
(y, lo más lamentable, que aparezcan nuevos ofreciendo lo mismo y cometiendo el
mismo error).
Alguno
objetará que no es cuestión de colocar el local en una calle donde no pasa ni
Cristo. Cierto. Pero en una calle saturada de negocios que ofrecen lo mismo,
poner otro negocio igual puede ser una invitación al fracaso. A no ser, claro,
que ofrezcas un producto o un servicio innovador, diferente, que la competencia
no ofrecía.
Y
ahí radica la importancia del análisis de la competencia, en descubrir nuevos
nichos de negocio, nuevos servicios y productos que antes no ofrecía nadie o de
una forma que nadie lo había hecho hasta ahora. El análisis de la competencia
es la forma de poner tus ideas frente al espejo y constatar sus defectos y
debilidades, así como sus fortalezas y oportunidades.
Por
último, el análisis de la competencia no sólo se acaba aquí, es decir, donde ha
de empezar tu negocio. Una vez implantado y en pleno funcionamiento tampoco hay
que despistarse. Tu competencia puede reaccionar a tu irrupción - o la
irrupción de otros, pues no eres el único que trama algo, querido emprendedor -
, innovando con un servicio o producto o una promoción o estrategia de precios
que pongan patas arriba al resto de los competidores.
En
el mundo de los negocios y el emprendimiento lo peor es quedarse quieto. Ya lo
señalaba Albert Einstein: "La vida es como andar en bicicleta. Para
mantener el equilibrio debes seguir en movimiento".